Polonia es uno de los destinos de referencia cuando hablamos de corzos, conocido por la elevada densidad y ofrecer una serie de opciones tremendamente agradables. Esa es la razón principal por la que todos los años recibe un número importante de cazadores extranjeros.
Al igual que en otros sitios, los corzos se cazan a rececho o aguardo durante las primeras y últimas horas del día. La temporada de corzos da comiendo a mediados de mayo, época en la que los días empiezan a alargarse mucho. Esto obliga, generalmente, a salir a cazar muy temprano, sobre las 3:00 – 4:00 de la mañana y de nuevo por la tarde sobre las 18:00. En esta época, con las siembras espigados ya, la subida de las temperaturas y que los corzos ya están asentados en sus territorios, hace que la actividad se vaya ralentizando poco a poco. Por ello, acabada la salida de la mañana sobre las 10:30, se suele regresar al hotel aprovechando las horas del día para descansar, almorzar, pasear y conocer las zonas próximas. Pasado el primer mes de temporada, la actividad de los corzos se pausa bastante. Sin embargo, la época de celo vuelve a ser un periodo de muchísima actividad. Al igual que en otros países de Europa, se produce entre el 28 de julio y el 10 de agosto aproximadamente. Durante esta época, los corzos están activos a casi cualquier hora y con las densidades tan altas, resulta un espectáculo ver cómo los machos acuden al reclamo.
Los cazaderos se caracterizan por alternar zonas de bosque con siembras y prados entre medias, ideales para los corzos. Normalmente, se suele hacer pequeñas entradas a aquellos sitios en donde los guías de caza tienen localizado algún corzo. Otra alternativa, es colocarse de aguardo al atardecer en alguna torreta de caza desde la que se dominen algunas siembras de esparceta o colza.
El equipo de guías de caza, la calidad de los alojamientos disponibles, la densidad de corzos por todo el país y el hecho de ser un tipo de caza totalmente relajada, hacen de Polonia un destino fantástico para cualquiera que busque disfrutar al 100% de una cacería de corzos en un ambiente totalmente tradicional y sencillo.