Situado en Europa del este, Bulgaria esta dividida al norte y sur por los Balcanes, ocupando una superficie total de 110.000 km2 y una altitud media de 470 metros sobre el nivel del mar. Hace frontera con Rumania al norte, Serbia y Macedonia al oeste, Grecia y Turquía al sur y con el Mar Negro al este.
El área de caza es predominantemente montañosa, aunque el terreno no presenta demasiada dificultad y cualquier cazador que esté medianamente en forma es capaz de afrontar aquellas montañas sin demasiada complicación, pudiendo así realizar una de las cacerías más bonitas que se puede hacer, la del rebeco, el rey por excelencia de las montañas de Europa. Además, la zona en la que cazamos es particularmente conocida por sus cacerías de venado. Se realizan en zonas de media montaña, de belleza única, donde los cazadores tendrán la oportunidad de meterse encima de los venados en plena berrea. La media de los trofeos suele estar entre los 9 y 10 kg. Finalmente, en lo que se refiera a caza mayor, el territorio también ofrece la posibilidad de cazar gamo, corzo, muflón y jabalí.
Los jabalíes pueden cazarse a rececho o en batida, muy apropiado para grupos de entre 5 y 10 cazadores. Al ser terrenos libres de alambres, conviene ser el mayor número de cazadores con el objetivo de cubrir mejor el escape de los cochinos. Las batidas de jabalí en esta zona de Europa se consideran una de las formas de caza más divertidas y tradicionales y la posibilidad de hacerse con un “machazo” en un entorno como este es, sin duda, una de las experiencias más emocionantes para cualquier cazador.
En relación con la caza menor, Bulgaria es uno de los paraísos europeos para el urogallo y la becada. Los urogallos se cazan entre el 15 de abril y el 15 de mayo, coincidiendo con la época del celo. Como en otros países, se cazan al amanecer y a última hora de la tarde, tratando de localizar los cantaderos. Su caza es un auténtico ritual y pese a lo que muchos puedan creer al tratarse de una gallinácea, su caza pondrá a prueba las capacidades de cualquier cazador. Por su parte, la temporada de becadas tiene lugar desde el 15 de agosto hasta finales de febrero, siendo su mejor época entre mediados de noviembre y mediados de febrero. Como no puede ser de otra manera, se cazan con setters y en una zona infinita de robles centenarios, un sueño para los amantes de la becada.